Ayer escribí unas líneas con dedicatoria especial. Unas palabras para quien lee este cuaderno de apuntes. Hoy hallé un comentario. Ruth escribió lo siguiente:
"HOLA ALEJANDRO, QUIERO FELICITARTE POR EL TIEMPO QUE DEDICAS A ESCRIBIR AQUÍ, POR EL CONTADOR VES QUE MUCHAS PERSONAS TE LEEMOS, LOS MENOS QUIZÁS EN ALGUNA OCASIÓN ENVIAMOS UN COMENTARIO A TUS ESCRITOS, A VECES PIENSO QUE PARA TI SERÍA SATISFACTORIO ENCONTRAR A MENUDO ALGUNA APORTACIÓN NUESTRA, POR MI PARTE TE DIGO GRACIAS POR ACERCARME A COMITÁN, GRACIAS POR ALIMENTAME EL ALMA. DESEO DE TODO CORAZON QUE EN TU REGRESO A COMITAN ENCUENTRES TUS SUEÑOS PERDIDOS, SUERTE EN TODO LO QUE EMPRENDAS. UN ABRAZO
RUTH"
Esto confirma que siempre hay alguien del otro lado, que los seres humanos podemos y debemos comunicarnos. Esto reafirma la esperanza de que otro mundo es posible. Un mundo en donde el diálogo propicia mejores perspectivas. Gracias, Ruth, por hacerme saber que no estamos solos. Gracias, porque, en efecto, tu comentario me resulta muy satisfactorio.
Un abrazo.
