Querida Mariana: sí, la foto que te comparto es un fotomontaje, me lo envió Luis Aguilar, el admirado escultor comiteco.
¿Por qué me la mandó? Porque me dijo si podía compartir el fotomontaje con vos, para que lo vieras y des tu opinión. Pucha, es un privilegio que te tome en cuenta. Bueno, él sabe que vos sos experta en imágenes.
Entiendo que Luis tomó la fotografía una mañana luminosa en Comitán y le encaramó el busto de Belisario Domínguez, que es su propuesta escultórica para llenar un vacío histórico que existe en el pueblo de Comitán de Domínguez. Dicho pueblo, que lleva el apellido del ilustre héroe, no tiene una imagen suya en el parque central, en el mero corazón. Luis propone que el busto de Belisario, realizado por él, se coloque en una de las esquinas del parque, en el mismo corredor donde, en el otro extremo, está el busto que le dedicó a Rosario Castellanos, nuestra niña amada.
Vos y yo hemos platicado que, en el siglo pasado, la figura de Belisario estaba presente en el paso de la gente de acá y de los visitantes, había un busto sobre una columna, y luego hubo la gigantesca estatua que hoy está en la entrada a Comitán. Era imposible ignorar esa enorme figura, tan enorme como el legado cívico.
Te conté que, siendo estudiante de primaria, en la Matías de Córdova, el director me concedió el honor de representar a mi escuela dando un mensaje en el acto público que se desarrolló al lado de la estatua de tío Belis. No recuerdo bien, pero entiendo que algún maestro escribió el mensaje y yo me concreté a leerlo, me reconocieron como un buen lector y merecí el honor. Sí recuerdo que tuve un dislate que provocó sonrisas de la audiencia, pero me recompuse y terminé mi participación con éxito.
¿Por qué te cuento esto? Porque insisto en el vacío existente en la actualidad. Desde hace mucho he solicitado que se le haga justicia a Belisario en su pueblo. La escultura (réplica de la existente en el Senado) está en el patio central del palacio municipal, cuando hay un acto en memoria de tío Belis el pueblo queda relegado, porque se cierran las puertas y sólo acuden las autoridades y los invitados especiales. El homenaje al héroe de la palabra libre es un acto exclusivo.
He solicitado en nombre del pueblo de Comitán que esa estatua regrese al parque, así como el original está en un lugar privilegiado del Senado de la República, la réplica debe estar en el paso de los ciudadanos, para que todo mundo se topetee con la figura del máximo héroe civil de México.
Posdata: hoy, el escultor Luis hace una propuesta, para llenar dicho vacío, para que el corazón de Comitán tenga dos grandes presencias históricas, el busto de nuestra Rosario y el busto de nuestro Belisario. Que la creatividad de Luis, gran artista del pueblo, con su obra plena de oquedades llene el vacío histórico. Vos, ¿qué opinás?
¡Tzatz Comitán!
