miércoles, 29 de diciembre de 2010

RESPUESTA A ANÓNIMO

Anónimo dijo...
Tengo una duda ¿el movimiento de la prepa fue en 1974 o en 1972?
porque fué cuando el destino dividió a las escuelas y me gustaría saber quienes fueron los actores de esa gesta heroíca.
Saludes


Estimado anónimo: mi generación 71-74 fue la primera de tres años, anteriormente el bachillerato consistía en cursos de dos años.
Pero, así como fue la primera en tiempo más largo, fue la última en estudiar en las instalaciones donde actualmente está el Centro Cultural.
Escribí que mis compañeros iniciaron el movimiento de huelga, porque no tuve más participación. Lo único que hice fue pintar unos carteles donde se exigía la salida del Director (Arq. Roberto Zúñiga Ortiz). Ah, también, una mañana, brinqué por una ventana y entré al laboratorio de química; saqué un bote con alguna sustancia y lo vacié en un tanque de agua que existía en un rincón del patio. Como los compas iniciadores del movimiento cuidaban las instalaciones ¡dormían ahí! Se acompañaban con fogatas en el patio, guitarras y uno que otro pomito de aguas espirituosas. Uno de los compas se levantó como a las diez de la mañana y fue a lavarse al tanque, metió las manos y comenzó a mentar madres: ¡el agua quemaba! No dije algo. ¿Quién sabe qué sustancia era? Estaba escrito que mi vocación no era la química; tampoco mi vocación era ser un "caifán" porque me sentí muy mal, pensé lo que hubiese ocurrido si el compa lava su cara y se echa agua a sus ojos. Sugerí que vaciáramos el agua. Fui al depósito de basura y mostré el frasco vacío. "Algún cabrón vació el contenido", dije. Quitamos el tapón y el depósito de agua se vació y un compa consiguió una escoba y le dio una buena limpieza y volvió a llenarlo con agua limpia. ¡Uf!
Ahora que el Ayuntamiento Municipal decidió (con complejo de pueblerino) construir el "árbol de navidad más grande del estado" y colocar una hilera pobre de focos usando como soporte el astabandera, recordé que en el movimiento del 74 (recuerdo que cuando se dio la huelga estábamos en tercer grado de preparatoria) Marco Antonio Constantino Kánter -hermano de quien fue presidente municipal y quien era uno de los líderes del movimiento- bajó la bandera nacional y subió al astabandera una bandera rojinegra. Más tardó Marco en hacer esto, que Don Luis Bonifaz en llegar (don Luis vivía a media cuadra, ahí tenía su vinatería). Don Luis, enojado, bajó la bandera de huelga y nos metió una reprimenda de Señor Padre. Entre sus conceptos estaba el de respetar los símbolos patrios. Por si a alguien le quedaba duda que hablaba en serio sacó la pistola y todos nos quedamos muy quietecitos.
¿Quiénes movían los hilos de este movimiento? ¡Lo desconozco! Lo que sí puedo decirte es que el movimiento obligó a que llegaran las autoridades de la Secretaría de Educación y se comprometieron a construir el actual edificio de la preparatoria.
Dentro de las gracias de nuestra generación debo decir que, también en el tercer año, nos dividimos en dos grupos. Tampoco entendí bien a bien por qué se dio este movimiento, pero un día algún compa pasó a preguntar a los de la periferia si nos integrábamos al grupo de fulano o al de sutano y, sin mucha convicción, nos adherimos a un grupo sin saber realmente por qué debíamos abandonar al otro. Esto ocasionó que al fin de cursos se celebraran dos fiestas de graduación. Don Jesús Aguilar Durán apadrinó a un grupo comandado por Raúl Sánchez Crócker (famoso tenista, desgraciamdamente ya fallecido), y Jorge De la Vega Domínguez apadrinó al otro grupo que era dirigido por José Luis Molina (quien ahora radica en el estado de Tlaxcala).
El día de ayer nos reunimos algunos integrantes de esta generación. ¡Por supuesto, ahora ya no hacemos distingos de división y nos unimos con la convicción de que somos parte de una generación que cambió los destinos, para bien, de esta hermosa institución! Por esto, cuando corrió el rumor de que el Presidente Municipal construiría un nuevo edificio para aprovechar los terrenos donde se encuentra actualmente la escuela y ceder los terrenos para una franquicia (de esas que nos traen el "progreso"), estuvimos dispuestos a encabezar el movimiento de protesta y no permitir tal absurdo. Por fortuna, la prepa sigue donde siempre, desde la década de los famosos setentas. Gracias, Anónimo, por entrar al blog. Un abrazo.