lunes, 1 de abril de 2024
CARTA A MARIANA, CON TACOS
Querida Mariana: es un chiste sobado, dice: México es el país del taco… ta’costumbras a no comer, ta’costumbras a pasarla mal…
Pero, en esencia México es el país del taco, porque basta una tortilla para hacer un taco con lo que se te antoje o lo que hallés.
Tengo amigos que, cuando es temporada de tzisim, agarran un puñito, lo colocan en una tortilla, le ponen unas gotas de limón, hacen taco la tortilla y ¡mueven la carraca con gusto indecible!
¿Por qué se llama taco el taco? No sé. Imagino que el nombre lo da la forma, alargada y redonda. Digo esto, porque en los billares así se llama al palo que sirve para golpear las bolas; además, los futbolistas usan zapatos con tacos para el juego.
¿Cómo no se van a confundir los hablantes extranjeros cuando aprenden español en México? Apenas están aprendiendo a nombrar la comida cuando escuchan que deben tomar “un taco” para jugar carambola. Ya imagino la confusión que aparece en sus mentes, los veo tomando un taco de canasta y con éste golpeando la bola de marfil.
“Hacete unos taquitos”, dice la abuela y pasa unas tortillas y un guisadito. Recuerdo que, en la entrada de la Facultad de Ingeniería, de la UNAM, vendían “tacos suaves”, con diversos guisados. Yo pedía dos tacos con arroz y huevo duro. Así me gustaban los tacos, pero había de tinga, de chicharrón en salsa verde, de frijoles (“de saco”, decían los malcriados). Eran tacos con doble tortilla, bien servidos, con esa dotación quedabas listo hasta la cena, que, en muchos casos, volvían a ser tacos. ¡Ay, señor!, pero los de la noche ya eran taquitos dorados. Sí, los tacos son pasados por el aceite o así, al natural.
Y digo esto, porque me enteré que hay un día especial, que no sólo lo celebran en México, sino también, lo celebran en los Estados Unidos de Norteamérica (Taco Day). ¡Pucha! Bueno, es comprensible, con tantos millones de paisanos que viven allá, existen muchos restaurantes donde preparan tacos, no como los del país, sino en una versión un poco extraña, pero que a final de cuentas le llaman taco. Hay una cadena de restaurantes muy famosa que se llama Taco Bell. En USA lo que tiene más horma de taco (enrollado, cilíndrico) lo llaman burrito y sí, querida mía, se pronuncia así: burrrrito.
Sigo siendo taquero. Soy un poco lo que se dice vegano, pero no dejo de prepararme mis tacos. En Puebla mi mamá hacía unos exquisitos tacos al pastor, lo único que modificaba era la carne de cerdo, por soya. ¡Geniales! Ahora voy al mercadito de El Cedro y compro tortillas moradas (en el mercado de Cholula comía unas quesadillas, sin queso, de flor de calabaza con masa morada, también exquisitas). Mi mamá prepara una ensalada de nopalitos con aceite de oliva y pico de gallo y con eso preparo mis tacos. ¡Ah, disfrute total!
A mi Paty le siguen encantando los tacos de canasta, es feliz comiendo unos taquitos de chicharrón. En los años ochenta fuimos muy taqueros, llevábamos a los hijos a comer taquitos en “Los cochinitos”, pero, sobre todo, en la taquería “Zinapécuaro”, que está en el bulevar, frente a donde estuvieron los Cines Galaxia 2000. Tacos ¡riquísimos! También íbamos a una que se llamó “La salsa verde”, con una salsa hecha con aguacate; y también una de las favoritas era la taquería de Belisario, que preparaba unos tacos de carnitas de lujo, a Belisario le decíamos “Choris”, de cariño.
Los tacos más ricos los probé en una afamada taquería de la Ciudad de México, su especialidad eran los tacos de lengua. Ahí sí que quedaba el dicho: de lengua me como un plato, un plato de tacos. Aunque también, en mis épocas de estudiante en la UNACH, en Tuxtla, iba a disfrutar unos tacos de ubre que eran sensacionales. La ubre siempre me ha gustado (no me quedés viendo así).
Posdata: uno de los hijos del dueño de la taquería “Sahuayo” fue mi compañero en la primaria Matías de Córdova, él siempre tenía mucha paga, era mayor que la mayoría de niños. ¿Cómo creés que le decíamos? “El tacos”.
¿Por qué se llama taco al palo del billar? ¿Por qué se llaman tacos los zapatos de los futbolistas? México es el país del taco, ta’costumbras a un modo de hablar peculiar.
¡Tzatz Comitán!