lunes, 24 de octubre de 2011

PALABRA

Ella dice que buscará su palabra. Lleva varios días en el intento. Hallar la palabra no es sencillo, porque es casi casi como si definiésemos el camino. Yo, desde hace mucho, hallé mi palabra. Mi palabra es Almohada, porque (lo he dicho) tiene algo de alma y de hada. El alma es la esencia del hombre; ¿el hada? alude al mundo fantástico. Desde entonces, mi búsqueda tiene que ver con el crecimiento espiritual y con la búsqueda del niño que fui; niño que vivía inmerso en el mundo de la imaginación. Ella, ahora, busca su palabra. ¡Ah, si fuese posible iluminar su camino! Pero no le es dado a ningún mortal meterse en caminos vedados. Cada uno debe elegir su palabra, pepenar su piedrita de nube para embarrarla en el corazón.