jueves, 18 de enero de 2018

DEFINICIÓN DE BICICLETA




Rosaura dice que el inventor de la bicicleta se equivocó, debió, en el momento que Henry Ford inventó el auto, patentar las calles de las ciudades a fin de que éstas fueran de uso exclusivo de los ciclistas. ¿Imaginan un mundo en donde la bicicleta fuera la reina de los vehículos? Bueno, cuentan los viajeros que en Europa existen ciudades donde casi casi se cumple tal ideal.
La bicicleta es ahijada de la carreta, por la discreción de sus piezas. El auto es engreído; en cambio, la bicicleta es modesta.
A veces pienso en las piezas que conforman la bicicleta y las piezas que lleva un auto. Este último es complejo en su diseño. Siempre que pienso en la bicicleta pienso en el cuadro, en el sillín, en el manubrio, en los pedales, en los frenos, en la cadena y en las llantas. ¿Verdad que es un vehículo sencillo? Claro, si uno piensa en el patín del diablo éste es más simple aún, pero, por lo mismo, se puede afirmar que el vehículo del justo medio es la bicicleta.
Cuando la niña se sube a una bicicleta por primera vez, el papá la acompaña, el papá, con una mano, sostiene el aparato e impulsa a la niña que pedalee y conserve “el equilibrio”. ¿Ven qué maravilla de imagen? ¿Observan qué prodigio de lección?
Nunca más, dicha niña tendrá ese privilegio. Un día, ya adolescente subirá a un automóvil y aprenderá a manejar. El papá podrá acompañarla, podrá enseñarle los movimientos para cambiar velocidad, pero nunca le dirá que conserve el equilibrio. Jamás. Aprender a manejar un auto no tiene la magia que sí posee el aprendizaje de la bicicleta.
Una mañana luminosa la niña conserva el equilibrio sobre la bicicleta, el papá entonces, corriendo a su lado, le dice: “Pedalea, pedalea”, como si le dijese: “No te detengas”. Este es el segundo instante supremo, el momento en que la vida toma el verdadero sentido.
Sólo por curiosidad, ¿algún día han tomado el diccionario de la Real Academia de la Lengua Española y leído lo que dice respecto a bicicleta? ¿No? Bueno, acá está la definición: “Vehículo de dos ruedas, normalmente de igual tamaño, cuyos pedales trasmiten el movimiento a la rueda trasera por medio de un plato, un piñón y una cadena”. ¡Qué pobre definición! Nunca menciona el equilibrio, concepto esencial para caminar con paso firme en la vida.
¿Por qué el diccionario no menciona ese prodigio de chunche que era la dinamo, chunche que, gracias al pedaleo, generaba energía para iluminar la lámpara de noche? ¿Por qué no dice que los seres humanos tenemos una dinamo y gracias al movimiento constante podemos iluminar nuestro espíritu? Las definiciones de diccionario siempre son mezquinas y alejadas de la esencia. Olvidan que los objetos no son simples objetos, olvidan que una bicicleta es mucho más que un vehículo. Una bicicleta es el mecanismo por el cual los padres, los verdaderos padres comprometidos, dan a sus hijos la lección más importante de la vida: Conservar el equilibrio, siempre, siempre.
Rosaura dice que el automóvil es como un dinosaurio y la bicicleta es como una garza. ¿Quién imagina ir de un lado a otro en un dinosaurio?