domingo, 29 de octubre de 2023

CARTA A MARIANA, CON PRESENTACIÓN

Querida Mariana: ayer prendí el celular. Hallé esta felicitación de mi querida hermana Esther. Esta etiqueta fue mi ablución. Luis acostumbra beber un vaso de agua al despertar, Jorge y Ana van al deportivo a jugar básquetbol, el maestro Temo sale a correr, Rocío hace juegos de cama, a mí me encanta que Rocío me cuente lo que hace con su pareja, ah, es como beber un vaso de agua, como echarse una cascarita de básquet, como correr tras el misterio del sexo. ¡Nunca atrapa el misterio!, por eso le encanta la vida. Yo, todas las mañanas oro y luego hago mi taichí de viejito. Ayer, se agregó la felicitación de mi hermana. Ella es un encanto, todas las mañanas platica con mi Paty, siempre está pendiente de nosotros. Ayer me dijo que esta felicitación la hizo Xiadani, bisnieta de mi papá, quien labora en la Ciudad de México, en uno de los periódicos más prestigiosos de la república mexicana. ¿Mirás cuánta bendición? Antes de la presentación del número 37 de nuestra revista Arenilla, ella mandó esta etiqueta, extendió su mano y regó confeti en mi espíritu. ¿Cómo nos fue en la presentación? ¡Cómo nos iba a ir! Genial. No podía ser de manera diferente, mi hermana, desde temprano, auguró que nos iría bien. Al salir de casa mi mamá, como todas las mañanas, me dio su bendición. Cuando dejé a mi Paty en la universidad, porque le tocó guardia laboral, ella también nos deseó suerte. ¡Cómo nos iba a ir! Genial. Tuvimos muchas muestras de aprecio, amigos y amigas llegaron al auditorio de la Casa de la Cultura, el poeta Arbey y muchas personas de Coneculta nos auxiliaron. Fue un honor que el moderador de la mesa donde participaron Paty y Roberto Carlos fuera el maestro Mancilla, lo hizo con experiencia y con mucho afecto. Llegaron muchos amigos a escuchar lo que Roberto y Paty comentaron, y disfrutaron (de veras) con el video que Cielito realizó, un video de diez minutos que fue síntesis de las 37 portadas que resumen la historia de Arenilla impresa. Estuve en la entrada recibiendo a los amigos, platicando en forma breve, invitándolos a que se sentaran. ¡Cómo nos iba a ir! Genial. La presentación fue uno más de los actos del Festival Rosario Castellanos. Mi querido ex jefe Luis Ignacio Avendaño Bermúdez llegó acompañado de mi querido Javiercito Gordillo Ballinas, al recibirlos recordé que el licenciado Avendaño, gran lector, ha insistido en que el Festival Rosario tenga como eje principal a la literatura, para que honre la figura de nuestra escritora comiteca. Sí, pienso lo mismo. En la presentación del programa general que las autoridades hicieron, el comunicólogo Iván Ibáñez, gran lector, preguntó por qué no se privilegia a la literatura, dijo que el mundo entero volvería la mirada a Comitán si en un festival invitaran a Isabel Allende o a Mario Vargas Llosa. Alguien torció la cara y dijo: ¡Vargas Llosa! ¿Por qué no? ¡Claro que sí! ¡Que al Festival Rosario Castellanos vengan grandes escritores y escritoras de todo el mundo, a honrarla, a decir que Comitán es una tierra de privilegio! Que venga la Sonora Santanera, pero como un agregado, que lo esencial sea la palabra artística. ¿Por qué no? A Comitán llegarían carretadas de amantes de la literatura. Recordemos que dentro de dos años, en el 2025, el mundo conmemorará el centenario del nacimiento de nuestra Chayo. Ojalá el festejo sea un guateque de trascendencia universal (es una exageración, el universo es más grande que nuestro mundo, mucho más grande), que sea el feliz pretexto para encauzar los ríos de agua limpia. Lo mismo piensa el querido licenciado Emmanuel Cordero Sánchez, mi ex jefe, quien también nos acompañó. ¿Ya miraste? Dos ex presidentes municipales del pueblo nos acompañaron. En nuestra presentación la palabra refulgió en las voces de Paty y de Roberto, la palabra tuvo su propio encanto, su propia seducción; cerramos con el video, donde, de nuevo, la voz educada de Paty se alió a las imágenes que Cielito trabajó en posproducción. Escuché la opinión de expertos que coincidieron en decir que el video estuvo muy bien hecho. Bueno, pensamos nosotros, es el sello de la casa; a la hora que intervino el profesor Roberto García Pérez dijo que los comitecos sabemos hacer bien las cosas. Sí, cuando decimos que lo hicimos a la comiteca estamos diciendo que lo hacemos en forma chingona, que nos gusta que todo quede mero lek. Cumplimos seis años de esta propuesta editorial. Muchos amigos y amigas nos acompañaron. Al final entregamos un ejemplar del número 37 a cada uno de ellos, no faltó quien nos pidió dos más, porque… Sí, adelante, nos llena de orgullo que (sin albur) nos la pidan. Posdata: desde el Estado de México, mi hermana mandó su felicitación. A la oración, al taichí de viejito, se unió el vaso de agua limpia que ella mandó. Luis bebe cada mañana un vaso de agua; Jorge y Ana salen de su casa con un balón de básquet, bien temprano; el maestro Temo (quien también nos acompañó) cierra la puerta de su casa y comienza a correr y a saludar a las decenas de amigos y amigas que se topa en el camino. Rocío sube el muslo desnudo sobre el de su amante y mueve la pierna, es su forma de recibir el día. Bendito Dios. Nos fue genial. Consigno que el primero en llegar fue el doctor Rubén Álvarez Solís, recién llegado de Villahermosa, Tabasco, y en seguidita, como si fuera carrera de cien metros, llegó el licenciado Efraín Albores. ¡Tzatz Comitán!