lunes, 4 de febrero de 2008

La diferencia


¿Hace diferencia leer un libro?
¡Por supuesto que sí!
Abrir un libro y comenzar a leerlo es un poco como quitarse una venda de los ojos.
Todas las mañanas sale el sol por el horizonte, pero no todos lo apreciamos, no todos tenemos conciencia de ese suceso.
Abrir un libro es un simple recordatorio de que el sol ¡sale!
Abrir un libro es llenarse de otras esencias, de otros perfumes, de otras humedades.
Abrir un libro es como entrar a una casa con cientos de miles de cuartos. ¿Qué hay en cada cuarto? Puede haber cosas desagradables como ratas, como cadáveres, como intrigas, como lámparas apagadas y muchas cosas más; pero también hay madrugadas, caricias, nubes sobre mesas y camas.
¿Hace diferencia leer un libro?
¡Por supuesto que sí!
Hace falta iniciar una gran cruzada a favor de la lectura. Un programa sostenido y eficiente que demuestre que la diferencia entre el mundo que hoy vivimos y el mundo que es posible lo hace ¡la lectura de un libro!