Querida Mariana: siempre he dicho que los comitecos y comitecas no regateemos reconocimientos. De igual manera me uno a la voz popular que recomienda no regatear en mercados con nuestros productores. ¿Por qué -dicen las personas conscientes- vamos a los grandes supermercados y pagamos sin chistar? En cambio, en los mercados del pueblo medio mundo regatea y pide a los productores que haga rebajas. ¡Dios mío! ¡Qué inmisericordia! ¡Qué pobreza de espíritu! He escuchado, al inicio de la temporada de lluvias, que mucha gente se queja del alto precio del tzisim, pucha, ¡ni que fuera caviar!, dicen, tratando de ser de mucho mundo, muy ingeniosos. Yo pregunto a estas personas ¿saben acaso todo el trabajo que implica la colecta de la hormiga alada? Conozco casos de amigos y amigas de la zona rural que se levantan a las tres de la madrugada, se visten, se colocan algunas protecciones en el cuerpo para no recibir las mordidas de las hormigas y se ponen a levantar los animalitos que meten en unas cubetas de agua. Me han mostrado las picaduras terribles que sufren en todo el cuerpo, hasta en el cuello. ¿Qué, en el cuello? Sí, hasta ahí suben las hormigas en intento natural de defensa. Y luego viene la joda de la lavada, de la secada, de la dorada, de estar pendiente que los animalitos no se quemen en el comal. Es una real joda. Y la gente llega al mercado, quitada de la pena, y se queja del alto precio y piden rebaja. ¡Qué ingratitud! El regateo es una práctica que no es cristiana.
Que no haya regateo, ni económico, ni espiritual. Que el pueblo de Comitán reconozca a su gente, desde el humilde trabajo del que levanta tzisim, de la que hace los chinculguajes o los pitaúles, hasta el que alcanza las más altas cumbres del conocimiento y de la creatividad.
Comienzo diciendo que acá debemos agradecer y reconocer la labor que realiza el maestro Muñoa Pola (de su muro me robé la ilustración), quien es un investigador acucioso, apasionado, cronista natural de Chiapa de Corzo. Él, en forma frecuente, sube a redes sociales los hallazgos que realiza en diversos archivos, donde aparecen nombres de comitecos y de comitecas. Comitán, sin regateo intelectual, debe reconocer la labor que Muñoa Pola hace sin más interés que el de compartir gajos de historia. Gracias a sus colaboraciones espontáneas y geniales Comitán cuenta hoy con un gran legado que nos ayuda a conformar nuestro rompecabezas histórico. Estas publicaciones ya forman parte del libro de la página “Imágenes Históricas de Comitán”, que creó nuestro paisano Francisco Domínguez, quien radica en San Luis Potosí. Desde allá ha contribuido para que nuestro pueblo, su pueblo, ahora tenga un impresionante archivo fotográfico que nos ayuda a cimentar la nostalgia y el recuerdo para construir el futuro. En muchas de esas imágenes hallamos la grandeza del pueblo comiteco, a través del tiempo.
¿Ya miraste con atención la imagen que ahora comparto? Es una publicación que el maestro Muñoa Pola halló. Es una pequeñísima nota del año 1900 aparecida en un periódico. Pequeña, pero inmensa en su contenido. Mirá qué dice:
“LISTA de recompensas obtenidas por los expositores de Chiapas en la Exposición Universal de París de 1900. GRUPO I. Educación y enseñanza. Clase 12. Fotografía. 1 Benjamín Croker. Comitán. Mención Honorífica”.
Que no haya regateo, que todo el pueblo se sienta orgulloso de esta Mención Honorífica que un fotógrafo comiteco logró en la Exposición Universal de París de 1900.
Cuando leí la nota, breve nota, de inmediato entré al Internet para buscar alguna información acerca de la exposición que se efectuó en París, al inicio del siglo XX.
Mientras los comitecos y comitecas de ese tiempo participaban de los actos memorables que se realizaron con motivo a la inauguración de nuestro mercado primero de mayo, en París, en el lapso del 15 de abril al 12 de noviembre de 1900, el mundo participaba en una serie de actividades que eran la conjunción de lo mejor que enviaba cada país. Y ahí, en medio de lo mejor del mundo, nuestro fotógrafo comiteco obtenía una Mención Honorífica.
Ciento veinticuatro años después, una deportista chiapaneca, jovencísima, participó en las Olimpiadas que se realizaron en París y todo mundo le reconoció el mérito. Qué alegría. Nuestra querida directora de la Facultad de Ciencias Administrativas, de la UNACH, invitó a Alejandra Estudillo para que impartiera una conferencia a los chicos y chicas estudiantes de la universidad. Sin duda que muchas personas de la audiencia recibieron ese influjo de luz que los hizo pensar en valores deportivos como la disciplina, el entrenamiento permanente, una buena condición física para lograr méritos deportivos; sin duda que alguien fue tocado y pensó que estos valores los debe llevar a su persona para alcanzar sus sueños. Alejandra es una chica que inspira objetivos grandes. Que nadie regatee su mérito, que todo mundo reconozca sus méritos deportivos.
No puedo imaginar la alegría que tuvo el maestro Benjamín Cróker cuando supo la noticia de la Mención Honorífica que le fue concedida en la Exposición Universal de París. ¿Cómo fue recibida la noticia en el Comitán del 1900? ¿Hubo cuetes, verbena popular? ¿Llegaron hasta su estudio fotográfico y le llevaron canastas de fruta? ¿La autoridad municipal realizó un acto relevante en la plaza? ¿Le reconocieron a Don Benjamín este mérito de importancia internacional?
El pasado 2 de octubre, en el auditorio Roberto Cordero Citalán, del Centro Cultural Rosario Castellanos, la cantante y maestra de guitarra Cothy Soto Cróker (Crocker) fue objeto de un reconocimiento por parte de las autoridades de ese centro, dirigido por nuestro amigo el poeta Arbey Rivera (Matza Maranto, directora del Coneculta, máxima institución cultural gubernamental de nuestro estado de Chiapas, fue la persona que le entregó el diploma a Cothy, quien portaba un vestido entallado, bellísimo). Que no se regatee el mérito intelectual de nuestra cantante. Ella es gajo del enormísimo árbol del excelso fotógrafo comiteco Benjamín Cróker. ¡Qué grandeza de árbol comiteco, qué lleno de hojas luminosas!
De igual manera, esa tarde fueron entregados otros reconocimientos a destacados talleristas del Centro Cultural Rosario Castellanos; además del reconocimiento a Cothy, fueron reconocidos el maestro Erwin Rodríguez, de danza; el maestro Juan Martín Hidalgo, de artes plásticas; y el maestro Wilebaldo López, de marimba. Ah, excelente iniciativa, que va en el sentido de no regatear el talento de comitecos y comitecas ilustres. ¡Fanfarrias!
Hace poco el Rector de la UNACH, el Doctor Carlos Natarén Nandayapa, entregó dos Doctorados Honoris Causa, dos, y uno de ellos correspondió a nuestra paisana talentosa, la Doctora Leticia Bonifaz Alfonzo.
El pasado 1 de octubre de 2024 entró en funciones la LXIX Legislatura del H. Congreso del estado de Chiapas y ahí dos paisanos ilustres tomaron protesta, en posiciones destacadísimas, nuestros amigos Luis Ignacio Avendaño Bermúdez y Mario Guillén Guillén representan al pueblo de Chiapas y, de manera particular, a Comitán. Luis Ignacio fue nombrado presidente del Congreso de Chiapas (¡ah, nadita!), y Mario fue nombrado presidente de la Junta de Coordinación Política de la sexagésima novena legislatura (¡nadita!). Qué honor, qué orgullo. Nada de regateos, al contrario, todo el reconocimiento a estos ilustres paisanos.
Qué gran nota nos regaló el maestro Muñoa Pola, en 2024 nos enteramos del reconocimiento que Don Benjamín Cróker recibió en el año 1900 en un evento de gran trascendencia mundial, un comiteco talentoso fue reconocido por lo alto. ¡Nada de regateo intelectual!
Posdata: que nuestro pueblo se acostumbre a reconocer el talento de los suyos, que los impulse, que la autoridad hable en nombre del pueblo y encabece los reconocimientos a la gente de talento de Comitán. ¡Nada de regateos! ¡Nunca más! Fuera envidias y malos sentimientos, bienvenida el aura luminosa.
¡Tzatz Comitán!
