viernes, 28 de febrero de 2025
CARTA A MARIANA, CON HUELLAS
Querida Mariana: Pablo Salazar López inició la gira de presentación de su libro “Tras las huellas del ñandú”. Estará en varias ciudades chiapanecas. Inició en Comitán la tarde del 26 de febrero 2025, en el Centro Cultural Rosario Castellanos.
Asistimos Paty Cajcam y yo. Permanecimos atentos en la entrada del recinto, para abordarlo antes del acto y tomarnos la foto del recuerdo, la de privilegio. No contamos que él entró por otro acceso. Guayito nos dijo: ya está en la sala. Ya estaba sentado en el sitio de honor, rodeado de amigos lectores que hicieron a un lado el protocolo, adquirieron ejemplares del libro, solicitaron la dedicatoria y la firma. Pablo los complació. Pensé: queda demostrada la ley matemática de que el orden de los factores no altera el producto. Nos sentamos en la última fila, hasta ahí llegó mi amigo José Ramón y preguntó: ¿por qué están como coyol de chucho, hasta atrás? Y explicamos, porque nos retiraremos antes, la combi de Paty hace el último viaje a las siete y media y yo debo ir en busca de mi cama que hace su último vuelo a las ocho. Justo en ese momento, Hermilo Aranda, director del Centro Cultural, dio la bienvenida y presentó al autor y a Ornán Gómez, quien hizo los comentarios.
Ornán dijo que cada historia del libro de Pablo resulta una obra de arte y luego, aprovechando en forma genial la presencia del autor, le pidió que platicara algo de la forma en que realiza su proceso creativo, Pablo, generoso, compartió su testimonio, lo que fue ¡toda una experiencia! Comenzó diciendo que leyó muchas biografías de escritores y concluyó que hay muchas maneras de abordar la creación, por lo que él debía buscar su propio camino. Esta senda creativa la resumió en cuatro elementos fundamentales, lo que fue una cátedra vigorosa. ¿De dónde pepenó Pablo la esencia de los cuentos que fueron galardonados con el Premio Nacional de Cuento Juan José Arreola? De los estímulos de varios lugares; de la fascinación por los animales; de datos curiosos; y del vaivén geográfico con recuerdos borrosos.
Muchos narradores han reflexionado acerca de la poética de la narrativa en general, Pablo obsequió su poética personal, diseccionó su obra y dijo: de esto me nutrí para escribir. Cada escritor tiene su peculiar manera de crear, fue muy interesante estar en el laboratorio de Pablo siendo testigo de la forma de unir los elementos de su realidad para crear una obra sublime de ficción.
Lo habíamos advertido, la presencia de Pablo sería lo que fue: un lujo para Comitán. Ahora, la oportunidad la tendrán los lectores de San Cristóbal de Las Casas, de Tuxtla Gutiérrez, y de Tapachula, según el calendario publicado. ¡En buena hora!
Posdata: había activado en modo vibrador mi celular. A la hora que Pablo iniciaría la lectura de un fragmento del cuento que da título al libro, comenzó a sacudirse mi pierna. Me acerqué a Paty y le dije, en voz bajísima, ya es hora de retirarnos. Como siempre lo hacemos, primero salí y un minuto después salió ella. Pélale. Ella hacia la terminal de la combi y yo hacia mi casa. Algo pepenamos. Fueron momentos agradables. Pablo es una persona afable, inteligente, generosa.
¡Tzatz Comitán!