lunes, 3 de febrero de 2020

CARTA A MARIANA, CON AROMA A CHOCOLATE




Querida Mariana: Quien aparece en este cachito es José Ramón Castillo Pedrero. Muchos televidentes lo conocen, porque él es uno de los jueces del programa MasterChef. Yo no lo conocía, pero hace dos o tres tardes, Jesús Pedrero, director de cultura del Ayuntamiento de Comitán, me envió la imagen y comentó su orgullo porque José Ramón sea objeto de tal distinción (no cualquiera tiene el honor de aparecer en un cachito de la Lotería Nacional.)
En el Museo Rosario Castellanos existe una réplica del cachito de la Lotería Nacional, de cuando el sorteo fue dedicado a nuestra paisana. Violeta Pinto me contó la dificultad que entrañó tal gestión. Ella, más el actual director del IMSS, Zoé Robledo, y otros destacados personajes intervinieron para que tal distinción se lograra. Te cuento esto para que mirés que recibir tal honor no es sencillo. Ahora, en el sorteo del 14 de febrero del veinte veinte el personaje reconocido es el primo hermano de Jesús: José Ramón Castillo Pedrero.
El director de cultura me explicó que José Ramón es hijo del doctor Ramón Castillo Moya y de su tía Maluye Pedrero, hermana de su papá (mi amigo Humberto Pedrero), por lo que es nieto de doña Martitha Yáñez (quien fue reina de Comitán, ya que era una mujer bellísima) y de don Romeo Pedrero, ambos ya fallecidos. Asimismo, doña Martitha Castillo, quien vive en Comitán (tiene una tienda de ropa, en el barrio de San Sebastián), es tía abuela del chef, quien, como lo expresó en un mensaje: “(es) el primer Chef en recibir dicho honor.”
Como mirás, el MasterChef tiene sus raíces en este pueblo, aunque nació en la Ciudad de México. Ya entré a argüendear en el Internet, donde aparece mucha información acerca de su trayectoria, y revisé la relación de reconocimientos que José Ramón ha recibido.
No conozco al papá del chef, pero, por supuesto que sí conozco a su mamá: Maluye. Hace muchos años, muchos, inauguré una galería de arte (Galería Bonampak), en la casa de mis papás (a cuadra y media de la escuela Fray Matías de Córdova). Maluye (amante del arte) hizo favor de facilitarme una madona que ella pintó. El cuadro era de una factura preciosista, detallada y minuciosa. Saco esto a colación, porque tal vez da una idea de cómo el ambiente familiar influye para el crecimiento intelectual de los hijos.
En el Internet me enteré que José Ramón nació el 11 de septiembre de 1978 y tiene una trayectoria de gran relieve en la gastronomía nacional, con estudios en México, Francia y España. Tiene una firma de chocolates que se llama “Que Bo!”, que, de acuerdo con su página, ha sido “reconocida por la guía internacional Le Guide de Croqueurs de Chocolat, como una de las mejores chocolaterías del mundo, desde 2012, y hasta la fecha.” ¡Uf! Con razón, su primo hermano, Jesús Pedrero, me lo presumió. Ahora (¡qué bueno!), muchos comitecos están presumiendo también la liga que el Chef tiene con Comitán.
Por ahí veo una gran lección. Parece que José Ramón emplea cacao de esta tierra para hacer las delicadezas que ofrece al mundo. Mi sobrina Marta Zepeda, quien tiene su restaurante “Tierra y Cielo” y también es una de las mejores chefs del país, hace lo mismo: emplea materia prima local y con ella realiza platillos de excelencia. En literatura, esto se llama hacer universal ¡lo local! Los grandes autores literarios no han hecho más que “usar materia prima local” y lo han universalizado, gracias a su genio. Acá el genio de Martha (mi orgullo de tío) y el genio de José Ramón universalizan la gastronomía chiapaneca.
Posdata: Bueno, los comitecos, antes de comprar el cachito de la rifa del avión presidencial, compraremos, para conservarlo, un cachito donde aparece la imagen del hijo de Maluye Pedrero y de Ramón Castillo (claro, si sale premiado, pues lo cambiaremos y beberemos a salud del chef José Ramón.)