lunes, 30 de diciembre de 2024

CARTA A MARIANA, CON EL VIEJITO DE LA NOCHEBUENA

Querida Mariana: recuerdo las navidades de mi niñez. En casa el festejo era muy íntimo, nada de los grandes festejos con piñatas y gentío comiendo hojuelas (los llamados “pañalitos del niño Dios”), ¡no!, en casa todo era entre nosotros: mi papá, mi mamá y yo. Pero, como en las demás casas, era un momento glorioso, porque celebrábamos el nacimiento de Jesús (mi mamá hacía un bonito nacimiento) y esperábamos la llegada del Viejito de la Nochebuena. Yo me acostaba temprano, nervioso, expectante. Muy temprano, al día siguiente, me levantaba y corría a buscar los regalos que el Viejito me había dejado (fui un niño privilegiado, siempre tuve varios regalos. Te he platicado que uno de los más bellos y divertidos fue un coche de pedales, color plateado, con el que daba vueltas y vueltas por todos los corredores de la gran casa). Hoy los tiempos han cambiado, en pocas casas hacen los nacimientos y en más pocas recuerdan el motivo del festejo; hoy, el festejado es el más relegado. Lo que sí continúa es la tradición de dar presentes, ya no es el Viejito de La Nochebuena quien los da, ahora es la versión gringa de Santa Claus; aunque hay sorpresas. El otro día acompañé a Roberto Carlos, quien es el mero mero de la empresa Mira Quien Comitán, empresa que, año con año, desde hace cinco, promueve el acto Una Navidad Mágica, donde sin ser Santa Claus o el Viejito de La Nochebuena reparte muchos presentes a los fieles clientes de diversas empresas prestigiosas de Comitán y de la región. ¡Ah, qué bendición! Todas las personas extienden las sonrisas en los rostros cuando reciben un obsequio. ¿Sabés cuál fue el premio mayor en este 2024? ¡Una pantalla de 43 pulgadas! Ah, qué presente tan maravilloso. La persona que ganó el premio sólo tuvo que hacer una compra en una de las empresas participantes, obtener un boleto, escribir su nombre y colocarlo en la urna. La mañana del sorteo recibió la sorpresa de ver que era su boleto el premiado. ¡Qué buena iniciativa! ¡Qué buena respuesta de las empresas patrocinadoras! La mañana del sorteo varios empresarios acompañaron a los integrantes del equipo de Mira Quien Comitán, en Tarima, el restaurante bar donde se realizó el acto. Roberto me platicó que los sorteos anteriores se han realizado en otros locales maravillosos de nuestra población. El primer sorteo fue en el Restaurante La Comiteca, que está frente al parque central; el segundo y tercer sorteos los realizaron en el Restaurante 1813, que se llama así porque en el año 1813 las Cortes de Cádiz le otorgaron a Comitán el título de ciudad. El restaurante 1813 se ubica en el barrio de Microondas. ¿En dónde se celebró el cuarto sorteo de la Navidad Mágica? Fue en el restaurante del Hotel San Sebastián, que se encuentra en el tradicional barrio. Y en este 2024 el sorteo fue en el restaurante Tarima, que está muy cerca de la Piedra de La Ametralladora. El Viejito de La Nochebuena sigue llegando a Comitán, gracias a todos los papás y mamás que abonan las raíces del árbol de navidad; asimismo, la empresa de Roberto Carlos invita a empresas exitosas, de renombre, para que participen como patrocinadoras. Los grandes proyectos, lo sabés, se nutren del acompañamiento, el dicho que dice: “La unión hace la fuerza” ¡es una realidad! Te conté que mientras el equipo de Mira Quién Comitán realizaba la transmisión del sorteo platiqué con el propietario de Tarima, el arquitecto Iván. El Viejito de mi Nochebuena siempre es generoso conmigo, me da la oportunidad de conocer gente maravillosa, lugares espléndidos y escuchar testimonios de identidad. La empresa de Roberto Carlos tiene la palabra Comitán como parte fundamental de su nombre, porque es en el pueblo donde se desarrolla, donde hace comunidad, donde aporta elementos valiosos para que las empresas, en época navideña, agradezcan la preferencia de su clientela y la consientan. Posdata: este año, como los anteriores, Mira Quién Comitán consintió a sus patrocinadores, ofreciéndoles una novedosa manera de servir a la sociedad, porque no sólo la pantalla llegó a manos de una familia, también hubo más presentes que colocaron sonrisas en otras familias. Estuve con ellos, en el restaurante Tarima. Comitán era un nacimiento a mis pies. El regalo a los pies del árbol era mi pueblo. Sensacional. Único. ¡Tzatz Comitán!