martes, 25 de abril de 2023

CARTA A MARIANA, CON MOMENTO SUBLIME

Querida Mariana: en la foto está el gran cronista chiapaneco Marco Antonio Orozco Zuarth, quien, actualmente, es Jefe de División de Administración de Documentos del Instituto Mexicano del Seguro Social. Esta fotografía es histórica. Ahora explico. ¿Ya viste que revista tiene entre manos? ¡Sí! Arenilla, nuestra revista comiteca. El maestro Marco muestra el artículo que hizo favor de redactar especialmente para Arenilla, en dicho artículo celebra los ochenta años de fundación de esta institución. El artículo lo intituló: “El IMSS: ochenta años contigo” y da pormenores de una maravillosa exposición con ochenta fotografías que sintetizan esos ochenta años. La fotografía es histórica por lo ya dicho, pero, para nosotros no sólo contiene el ingrediente histórico profesional, sino también el cercano afectivo. Gracias al texto de nuestro cronista Arenilla-Revista llega por primera vez a la Ciudad de México. Esto nos llena de orgullo, sabemos que esta alegría la compartirán todos los amigos del pueblo que se sienten orgullosos de nuestra propuesta editorial. Nuestra revista circula en la región. Cada bimestre, los integrantes del equipo de Arenilla nos encargamos de repartir los dos mil ejemplares de la revista impresa en nuestro pueblo, en Las Margaritas, Tzimol, La Trinitaria (municipio que ahora vive una época de esplendor), La Independencia, San Cristóbal de Las Casas, en el aeropuerto de Chiapa de Corzo y en la Librería José Emilio Pacheco, de la UNACH. ¿Sabés cuál es el mojol de lujo? Nuestra revista llega a Huehuetenango, Guatemala. Desde el principio tuvimos el interés de unir a Chiapas con Guatemala, por la tradición cultural que compartimos desde hace siglos. Lo hemos logrado, porque nuestro director comercial en Guatemala, Carlos Rivas, no sólo distribuye la revista en Huehuetenango, plaza inicial, sino que, profesional al extremo, apasionado de su cargo, lleva algunos ejemplares a Quetzaltenango y a Guatemala capital. Por eso, para la vida de nuestra revista comiteca, esta fotografía donde aparece mi admirado maestro Marco Antonio Orozco Zuarth es una imagen histórica y simbólica, porque, por primera vez, insisto, Arenilla llega a las dos capitales de nuestras naciones: México y Guatemala. Siempre he dicho que nunca regateo reconocimientos; cuando advierto, desde mi punto de vista, un hecho prodigioso que realiza alguna persona o institución, siempre lo hago resaltar. Es importante hablar de lo bueno de lo nuestro. Pero, por otro lado, muchas personas dicen que alabanza en boca propia es vituperio. ¡No estoy de acuerdo! En este caso estoy hablando de la revista de la cual soy director general y digo que esto es un logro para nuestro equipo, para nuestros lectores, para nuestros gentiles patrocinadores y, en general, para nuestra región. Una revista comiteca, hecha con mucho amor y talento, llegó en su número 34 a la capital de nuestro país. Por esto, en forma especial hago un reconocimiento a quien propició este prodigio: el maestro Marco Antonio Orozco Zuarth, quien es un intelectual chiapaneco de excepción. En varias ocasiones he tenido la oportunidad de admirar los actos de Marco. Cuando estuvo como Director de Publicaciones de Coneculta Chiapas, este departamento realizó decenas de publicaciones. En tiempos de escasez ese logro lo festejan y lo reconocen todos los autores que resultaron publicados y los miles de lectores. Asimismo, en otra ocasión, Comitán recibió la presencia de muchísimos cronistas de toda la república en un congreso nacional cuya sede fue nuestro pueblo. ¿Quién fue el motor de ese acto? ¿Quién más? Sus pares reconocen en Marco a un gran cronista, a una persona interesada en la cultura, hoy cumple una encomienda a nivel nacional, Chiapas lo celebra. Posdata: sí, perdón, querida Mariana. Hablo de nuestros logros, sé que algunas personas nos regatean el reconocimiento, pero también advierto que muchos amigos y paisanos comparten nuestra alegría. Arenilla Revista llegó a la gran Ciudad de México, por primera vez. ¿París? ¡Ahí te vamos, tardaremos, pero estamos seguros de llegar! Llevamos algo de lo mejor de Comitán y de la región al mundo entero. ¡Tzatz Comitán!