miércoles, 30 de septiembre de 2009

UNA MÁS DE LOS TELEVISOS


El doctor Robert Dufour, filósofo francés, dice que uno de los mandamientos del liberalismo perverso es el que dice: "Ignorarás la gramática porque es un lugar común y sólo debe haber lugares individualizados".
A los poderosos les interesa que los mandamientos del liberalismo se sigan al pie de la letra. Mientras nuestra sociedad sea más alienada ellos asumen más poder.
Esta práctica se ha hecho de manera velada en el pasado y ahora es más obvia porque los poderosos se vuelven más cínicos cada vez.
Ahora (de nuevo, Dios mío) Televisa nos lanza un engendro más. Hace dos noches prendí la televisión, la conductora del Super lotto se despedía. "Les recuerdo -dijo-que ya están abiertas las inscripciones para participar en el programa CIEN MEXICANOS DIJIERON". Chin, pensé, ¡qué oso! La niña bonita, con cabellera de cascadas de agua chocolate, se equivocó. Apagué el televisor y me dormí.
Al día siguiente descubrí que ella no se había equivocado. El programa de Televisa, en efecto, se llama así: CIEN MEXICANOS DIJIERON.
Es una más de sus asquerosidades. A Azcárraga y corte celestial les conviene que el pueblo, cada vez más, se exprese de una forma no prestigiosa.
Ellos se quieren erigir en los poseedores del lenguaje especializado. Al pueblo le dan las sobras del arte y del buen decir. Cada vez más prostituyen nuestro lenguaje.
¿Qué se puede hacer ante tal aberración?
En este programa ponen como conductor a un pobre comediante. Digo pobre porque no tiene idea de lo que es el humor. Su supuesta comicidad se basa en el recurso pobrísimo de imitar el lenguaje de un chofer de un autobús público.
Se dice que la televisión es la nana de estos tiempos, la educadora de la niñez. ¿Qué clase de educación reciben los niños ahora que escuchan a la NACARANDA y al VÍTOR con sus vulgaridades?
Ahora, lo sabemos, medio mundo (como si fuera un chiste) repetirá el vocablo y el DIJIERON se convertirá -de manera subliminal- en algo prestigioso, en palabra de uso diario.
Esta es la tónica de la empresa televisora. Poco a poco nos va quitando nuestra identidad. Ahora se meten, de manera directa (porque lo hacen por escrito), con una de las posesiones más sublimes del hombre: el lenguaje.
A Loret de Mola habría que enviarle la foto donde un estúpido escribió: "CIEN MEXICANOS DIJIERON". A ver si lo exhibe en su noticiario.