Querida Mariana: Comitán se viste de gala, en atuendo y en espíritu. El próximo 15 de octubre de 2021, a partir de las siete de la noche, habrá un recital de música clásica.
Al hablar, y al escribir, las palabras fluyen en forma rápida. A veces es necesario hacer una pausa, para apropiarse bien de los conceptos.
Lo que acabo de escribir merece una pausa. Escribí que en Comitán habrá un recital de música clásica. ¿Mirás? Jóvenes artistas continúan con la tradición musical de este maravilloso pueblo. Por fortuna, esta cinta de luz sigue iluminando nuestros espíritus, sigue abonando el terreno donde vuelan los cenzontles y las tiucas.
El otro día te comenté que leí “El olvido que seremos”, la novela más reciente de Héctor Abad, escritor colombiano. Nada había leído de este autor, así que entré al Internet para saber algo de su vida, porque su novela me gustó, es un buen narrador. Hallé un video breve donde nos lleva a conocer su biblioteca personal, mientras describió cómo están catalogados sus libros, escuché música de fondo: Quinteto de clarinete, de Mozart.
Sí, querida mía, a través de biografías o de autobiografías de grandes escritores sé que muchos de ellos se acompañan con buena música, entre otros géneros: música clásica. El espíritu se viste de gala cada vez que escuchamos la obra de grandes autores musicales.
La noche del 15 de octubre, en el majestuoso escenario del interior del templo de San José, los comitecos Maximiliano Domínguez y Rogers Torres interpretarán obras de Chopin, Debussy, Bach, Reger, Cassadó y Piazolla. ¡Ah, qué deleite de sonidos! Maximiliano tocará el piano y Rogers el violonchelo.
Todo es tradición. Excelsos pintores también escuchan música clásica mientras pintan. Mario Pinto Pérez, artista comiteco, me dijo que cada vez que pinta una de sus hermosas acuarelas escucha un disco de música clásica.
Los clásicos, en cualquier arte, son las mentes más sublimes, quienes alcanzan los más altos edificios espirituales.
Por eso, lo entenderás, celebro con emoción que Maximiliano y Rogers rieguen con luz la ceiba que nos alimenta desde hace siglos. Ellos son continuadores de la gran tradición musical de esta generosa tierra. Ellos son de la estirpe de los mejores intérpretes musicales de Comitán. Ahora asoman nombres sublimes: el de la cantante Isabel Soria, quien, dice su ficha biográfica, fue una cantante soprano que cantó en un acto con la presencia de los reyes españoles; ella fue hija del maestro Fernando Soria. Asoma también el nombre de Esteban Alfonzo, autor de valiosas canciones y director-fundador de orquestas en el pueblo; el nombre de Roberto Martínez, excelente pianista que daba forma al aire, lo convertía en alas que volaban por todo el parque de San Sebastián; los nombres de los hijos del maestro Martínez, Maximiliano estudió en la Academia que dirige Lucía Martínez. Maximiliano y Rogers también modelan el aire que se vuelve manos para acariciar los espíritus.
La noche del 15 será noche de gala. En tiempos de pandemia, el espíritu comiteco recibirá una untadita con aceite, flama generosa para iluminar la ventana.
Mi amigo José Ramón, papá de Maximiliano, es un comiteco de cepa, que honra a su familia y a este pueblo, es un promotor de actos de gala. Este recital es uno de ellos. Lo soñó desde hace tiempo. El tiempo le da la oportunidad de ver realizados sus sueños, sueños que ennoblecen a esta muy noble ciudad.
¡Cuánto talento existe en esta ciudad! ¡Cuánta generosidad! ¡Cuánta luz!
Posdata: ¿El costo de entrada? Simbólico, apenas doscientos pesos por persona. Bien vale la pena invertir para alimentar la esperanza, para apapachar el espíritu.
El otro día escuché a Juan Villoro en una entrevista que le hizo Carmen Aristegui. Juan terminó con lo que concluyo esta carta. Juan dijo una frase de Confucio, que más o menos dice así: “¿Me preguntas por qué compro arroz y flores? Compro arroz para vivir y flores para tener algo por lo que vivir”.
Villoro aclaró que las flores son la cultura y que México puede ser uno de los mejores jardines del mundo. ¡Sí, cuánta luz en los pueblos de México! ¡Cuánta genialidad!
Comitán debe reconocer a sus mejores hijos. Que los dioses de la creación siempre bendigan a Maximiliano y a Rogers.
Por algo los mejores creadores escuchan música clásica, algo tiene el agua cuando la bendicen.
