Querida Mariana: el 6 de abril de 2022 fui testigo de un viaje fascinante. Todo lo vi desde el puerto.
El licenciado en Trabajo Social: Ismael Quintero Solís, ex alumno de nuestra institución, estuvo en el estrado del salón de conferencias de la Universidad Mariano Nicolás Ruiz Suasnávar.
Ah, me dio mucho gusto ver a Ismael, él fue mi alumno, egresó en 2016 y ahora ya ejerce la profesión en el Hospital Guadalupe Tepeyac, en Las Margaritas.
Y digo que todo es como un viaje. Un día, como en cualquier institución educativa del mundo, los alumnos llegan a las aulas de la gloriosa Mariano N. Ruiz, y ahí los maestros conviven con ellos, de lunes a viernes. Al salir del bachillerato, eligieron la muy noble carrera profesional del Trabajo Social, para servir a la sociedad. Ellos subieron al barco donde bogan los maestros; después del tiempo reglamentario, presentan su examen profesional, llegan los mariachis, se despiden de su universidad, bajan del fantástico barco y siguen el viaje en otros botes, en otros ríos, en otros mares. Ya, en su maleta llevan las herramientas para ejercer la profesión; la vida los espera. La época de entrenamiento terminó, es tiempo de enfrentarse a la realidad.
Ismael hizo una pausa laboral y llegó hasta su universidad y compartió su experiencia profesional con alumnos que, como él en su momento, se preparan en las aulas universitarias, para, luego, formular sus propios caminos.
Ismael fue el primer ponente del Ciclo que se llama “La Experiencia de un Trabajador Social en Diversos Ámbitos Laborales”. Ismael compartió su experiencia laboral en el sector salud. Los actuales estudiantes recibieron con agrado la participación de Ismael.
El Ciclo de Ponencias contempla la participación de licenciados en Trabajo Social, ex alumnos de la Universidad Mariano Nicolás Ruiz Suasnávar; la invitación es para que ellos regresen, visiten su alma máter y compartan sus vivencias con estudiantes de la propia universidad. Este proyecto se basa en ese principio donde se establece que los de casa siempre son recibidos con afecto. Ismael regresó a su casa, volvió con las manos llenas de frutos y los compartió con generosidad. Los estudiantes, desde la proa del barco, vieron un horizonte prometedor, porque tuvieron una experiencia de primera mano. “Esta es mi intervención en el trabajo”, les confió Ismael, y los muchachos entraron a una estancia donde hay personas que necesitan el apoyo de los profesionales del Trabajo Social. La ponencia estuvo aderezada con anécdotas de vida, porque el ámbito laboral de un Trabajador Social toca vidas, vidas que, en situación vulnerable, piden una mano para apoyarse.
El Ciclo “La Experiencia de un Trabajador Social en Diversos Ámbitos Laborales” está bajo la dirección de la maestra Lucy Flores, Coordinadora de la Universidad Mariano Nicolás Ruiz Suasnávar. Es una propuesta sensacional. Los estudiantes egresados de la Universidad, hoy destacados profesionales, laboran en diversos sectores sociales: en sectores públicos, privados, judiciales, educativos, de salud…
La propuesta de la Universidad permitirá a los alumnos de hoy acercarse a diversas áreas desde la mirada de profesionales que recibieron su preparación profesional en las mismas aulas, en el mismo barco. Todos son de casa.
Cuando Ismael egresó estuvo un año en el Seminario, luego laboró en el sector educativo en el ITAES; posteriormente ya ingresó al sector salud, en la empresa privada de ABC Scaner; y enseguida ya obtuvo su base en el Instituto Mexicano del Seguro Social, donde ha laborado en varios hospitales: en Mapastepec, Motozintla, Benemérito de las Américas, Ocozocoautla y en Guadalupe Tepeyac, en el municipio de Las Margaritas, hospital donde labora actualmente y aporta su entusiasmo y conocimiento en el Programa IMSS Bienestar.
¿Mirás cuántas vivencias? Ismael egresó en 2016, en apenas seis años ha hecho acopio de una serie maravillosa de experiencias. Con gusto y gran disposición, Ismael llegó a compartir. Al término recibió un reconocimiento que, en nombre de la comunidad universitaria, firmó el Rector, Maestro José Hugo Campos Guillén.
Posdata: me encanta ser testigo de estas rutas de viaje. Los alumnos se despiden un día, se bajan del maravilloso barco donde aprehendieron amaneceres y rosarios llenos de aire; bogan por otras rutas en busca de sus sueños; una mañana regresan y los volvemos a ver, exitosos, satisfechos. Ellos tienen afecto por quienes fueron sus maestros y son correspondidos. Nosotros, en lo íntimo, decimos que el viaje vale la pena y seguimos en el barco. ¡Salud!
