martes, 22 de diciembre de 2009

EL TAMBOR DE HOJALATA


Hace dos años me regalé un libro en navidad. Este año no "me regalaré" algo. Pensé que mi aguinaldo podría ayudar a darme un caprichito, pero se atravesó mi operación y mi aguinaldo voló como vuelan los años después de los cincuentas.
Por fortuna, un día llegó Pedro Ortiz a la Universidad Mariano N. Ruiz y donó un buen bonche de libros para la Sala Universitaria de Lectura.
Los alumnos y los maestros nos hemos favorecido. Ayer tomé "El tambor de hojalata" de Günther Grass y lo traje a casa.
Toda la tarde de ayer me la pasé metido en el mundo de Grass. No es casual que en la contraportada diga que este libro está considerado como "una obra magna de la narrativa moderna alemana".
La palabra "magno" es de uso riesgoso. Mucha gente la emplea como si fuera billete de veinte pesos. Pero acá el término está empleado de manera adecuada. La narrativa de Grass es magna.
Pedro se adelantó. De igual manera, Socorrito Román Sobrino, una destacada intelectual comiteca, ha donado a la Universidad un buen bonche de libros.
Dicen que la crisis nos está pegando duro, pero aún hay comitecos que hacen obras ¡magnas!
Que Dios bendiga los corazones de los hombres magnos y generosos.
Sigo con Grass.