domingo, 27 de marzo de 2022

CARTA A MARIANA, CON PRODIGIOS DE LA NATURALEZA

Querida Mariana: Pau dijo: ¡mirá, tío, un condominio! Caminábamos por este sendero con árboles a ambos lados. Si ella no lo hubiera dicho, habría pasado de noche. Nos detuvimos y vi lo que mi sobrina señalaba. ¡Sí, un condominio! Huecos circulares casi perfectos. Mi prima tuvo que explicarme para que me cayera el veinte. Dijo que eso lo había hecho un pájaro carpintero. Qué prodigio. Mientras estuvimos frente a este árbol una serie de preguntas asomó. Querida mía, ¿vos has estado frente a un condominio de esta naturaleza? ¿Cuál es el objetivo que persigue el pájaro carpintero al hacer estas maravillas? ¿Vive ahí? ¿Es como una casa de campaña en la campiña? No sé, nunca había estado frente a un árbol con este trabajo. Buscamos con cuidado y hallamos que ninguno de los otros árboles tenía estos huecos. Sólo este árbol fue el elegido. ¿Por qué? Un campesino que caminaba por ahí dijo que este árbol es una casuarina y que los demás son tulipanes de la india. Ya no preguntamos más, porque iba apurado a su parcela. Bueno. La rugosidad se ve diferente y no sólo eso, sino la forma. Los otros árboles tienen más ramas cerca de la base, en cambio éste ¡no! Éste tiene una semejanza con la torre de Dubai. ¡Es broma! Digo que nunca había visto algo así. En una ocasión sí vi a un pájaro carpintero, con su cabecita roja, pero no estaba haciendo su oficio. Ya andaba en su hora de descanso, andaba parado en una rama. No me preguntés qué clase de árbol. Únicamente en caricaturas he visto a un carpintero haciendo su oficio. Detenido sobre el árbol, picoteando sobre el tronco. Sé que la caricatura permite evadir las leyes físicas. Recordá al coyote del correcaminos, siempre le va mal, cae desde grandes alturas, queda como chicle en el piso, pero un segundo después ya está parado de nuevo, sin mayores inconvenientes. Pero, parece, que los pájaros carpinteros reales vencen la ley de la gravedad sin mayor problema, porque, cómo explicás, que el pájaro que hizo esta maravilla arquitectónica se detuvo en el tronco sin más apoyo que sus patitas. Nada de andamios para ponerse frente al tronco y comenzar a darle con el pico una y otra vez y otra. ¡Nada de apoyos! Entiendo que el pájaro llegó volando, puso sus manitas sobre el tronco y con sus delicadas y frágiles patitas se sostuvo e hizo su labor. ¡Cómo es posible! Las patitas son como popotes con respecto a su cuerpo. Cuando era niño creía que el pájaro carpintero era una especie de colibrí, que mientras hacía los huecos batía sus alas para sostenerse en el aire. ¡No! El pájaro carpintero se sostiene con sus patitas en una superficie completamente vertical. Si esto no es prodigio, no sé qué sí puede serlo. ¿Vos has visto otro pájaro que se detenga así en un árbol? Yo, me conocés, soy de poco salir, nunca he estado mucho tiempo en contacto con la naturaleza, por eso todo me sorprende y me maravillo. He visto pajaritos posados en árboles, pero los veo bien sentados en sus nidos, construidos en forma horizontal, los he visto posados en ramas horizontales, pero jamás he visto un pájaro que haga lo que hace el carpintero: sostenerse sobre una superficie vertical, y no sólo sostenerse, sino, además, hacer un trabajo fino y difícil. Cuando llegué a casa busqué en el Internet: la madera de casuarina es “muy dura, pesada y excepcionalmente fuerte”. Pucha, más piedritas para el costal de mi asombro. Si esto es cierto, el pico del carpintero debe ser más duro, más pesado y más fuerte, porque sólo así se explica pueda realizar su oficio sorprendente. ¿Y la madera del tulipán de la india? Busqué: “en África se usa para elaborar tambores, mientras que en África Occidental es utilizada para tallar”. Entendí, los otros árboles no son empleados para viviendas, son apreciados en el arte: para la música y para las tallas escultóricas. Así que no es casualidad que la casuarina sea la elegida. Cuando leí lo de la dureza pensé en la vocación indeclinable de este pájaro. Pensé en esas representaciones teatrales que se acostumbran en la primavera. Por favor, nada de disfrazarse de casuarina. Imaginá que vos estás disfrazada de casuarina, mientras un pájaro carpintero se para en tu pecho y comienza a abrir un agujero. ¡No, Dios libre! Posdata: el Internet dijo que los pájaros carpinteros hacen estos huecos para guardar sus alimentos. ¿Mi sobrina no tuvo razón? ¿Este árbol no es un vecindario sino una bodega vertical? Mario dice que sí, que son los lugares donde hacen sus nidos. ¿Quién tiene razón?