domingo, 18 de enero de 2009

Una luz tenue




Las manos de Dios siempre están abiertas. A veces, los hombres buscamos y hallamos esas manos generosas.
Hoy, todo el día fue de reconocimiento. José Luis cumplió años y nos invitó a acompañarlo en el festejo.
"El Bohío" es como la sucursal de un fogón donde la luz es tenue. Está ubicado en el valle que se recuesta sobre el cauce de La Angostura. El agua clara, el verde infinito y el sol son materias que se desparraman de manera generosa sobre esa tierra bañada por la luz.
A la hora de la comida, Stefany (sé que no se escribe así, pero así lo pronunciamos todos sus afectos)cantó con su voz educada. Cada nota que interpretó fue como una hoja de agua de río.
Hay momentos en que el hombre advierte con claridad la generosidad de Dios. Hoy fue uno de esos momentos, gracias a la generosidad de la familia Zúñiga González, quienes compartieron los dones recibidos. Ellos saben que la máxima lección de la vida es compartir la luz y el viento que se enredan suave en el corazón del hombre.