lunes, 27 de abril de 2009
DE RAYAS Y PUNTOS
Abrí este chunche y hallé que es aniversario de Morse, el inventor de la clave.
Fue en la ciudad de México donde descubrí este uso. Un maestro universitario me contó la anécdota. Contó que estaba como sinodal y, en medio del silencio apabullante del salón donde estaban los muchachos presentando el examen, escuchaba algo como el repiqueteo de un pájaro carpintero. Al final, otro sinodal se dio cuenta que afuera del salón estaba un muchacho que le pasaba todas las respuestas en clave morse al compa que estaba adentro. El muchacho de afuera, quién sabe porqué artes había conseguido copia del examen. Ambos muchachos habían estudiado un tiempo en el Colegio Militar.
Supe entonces que el aparato raro que usaban los telegrafistas servía para enviar mensajes con esta clave.
Los puntos y rayas de la clave Morse se me hacen tan lejanos como los lenguajes taquigráficos. Todo se resume en una serie de puntos, rayas y culebras retorcidas. Todo es como una fotografía en sepia.
Hoy que vi la palabra Google escrita en clave Morse los años sesentas se arremolinaron en mi cabeza.
El envío de telegramas exigía una redacción apretada. Con el mínimo de palabras debía expresarse un mensaje totalizador. "Llegué bien (punto) Universidad maravillosa (punto) Tíos bien (punto) Necesito trescientos pesos (punto) Saludos (punto)"
Era raro, pero las comas no se usaban. Todo enunciado se cortaba con puntos. Tal vez era porque el propio lenguaje así lo demandaba. La clave Morse emplea puntos y rayas (nunca comas). ¿Cómo se representaba una raya en el aparato que usaban los telegrafistas? Quién sabe. ¡Qué complejo!
Como ahora todo es más fácil. Coloco la palabra Comitán en un traductor y me entrega lo siguiente: _._. /_ _ _ /_ _ /.. /_ /á_. / (advierto además que las palabras de telegrama debían ir sin acentos).
Para los neófitos esto nos resulta tan complejo como una integral o derivada para el estudiante del sexto grado de primaria.