jueves, 30 de abril de 2009

Aniversario de El Heraldo de Chiapas


Sucede que El Heraldo de Chiapas cumple hoy su quinto aniversario. Dámaris, editora de la sección de Cultura, me pidió, hace días, una foto para incluirla en un suplemento especial que se publicaría hoy. No soy muy de fotos. En una ocasión leí una sabia enseñanza zen: “No te tomes fotos con famosos”. Yo, que siempre soy incluyente, llevé al extremo la sugerencia. Siempre he sido así. Me gusta tomar fotos, no que me tomen.
¿Qué hago?, le dije a Paty, cuando le comenté la petición de Dámaris. Ella, sabia, me dijo: “Abrazá al Misha, así la gente mirará al gato y no a vos”. Acepté la sugerencia. Salí al patio de la casa y le pedí favor a ella que me tomara la foto. Abracé al gato, éste se hizo el remolón porque no aguanta que lo abracen (siempre que viene un afecto a la casa y lo quiere abrazar, el gato se trepa a un estante de fierro y no baja de ahí hasta que se asegura que mi afecto ya anda por el barrio de San Sebastián).
Una vez que Paty me tomó la foto, se la envié a Dámaris de inmediato, junto con una frase que me pidió.
Hoy, como a las nueve y media, José Antonio compró El Heraldo en el parque central. “Saliste en el periódico”, me dijo. Guardó el periódico. Cuando regresamos a casa le comenté a Paty que su gato había salido en el periódico. “¿Dónde está?”, me dijo. En el periódico. “Ya me lo dijiste, pero ¿dónde está el periódico?”. Lo tiene José Antonio.
Tuve que explicar que José Antonio lo tenía porque él lo había comprado. Paty me exigió ir a la Farmacia del Ahorro, del bulevar, para comprar otro. Paty insistía en ver a su animal. Cuando lo tuvo me dijo que recortará la foto y la guardará. A la Tasha (que es nuestra perrita salchicha) le habló como si hablara con una niña de ocho años y le dijo que el gato había aparecido en el periódico y que si ella -la perra- se portaba bien, un día de estos yo me tomaría una foto con ella para que saliera también en el periódico.
En ese momento tuve la intención de escribirle a Dámaris para suplicarle que no vuelva a pedirme una foto. Pero luego me arrepentí de mi apresurado pensamiento. Si Dios permite que yo llegue vivo al sexto aniversario del periódico y si la sección de Cultura sigue viva y si continúo escribiendo para ella y si a los directivos del periódico se les ocurre celebrar con un suplemento especial y si publican las caras de los colaboradores, tal vez convenga tomarme la foto en compañía de la Tasha. “Siempre salís con cara de bravo”, me dijo Paty el día que me tomó la foto. Por eso, le dije, por eso acepté tu sugerencia. Sé que los lectores de El Heraldo vieron al Misha y no al hombre con cara de chucho que lo acompaña.
Bendito el zen que sugiere evitar las fotos.