martes, 4 de agosto de 2009

LORCA QUE TE QUIERO LORCA


Óscar Bonifaz siempre me sorprende. Anoche, al término de la presentación del libro de Luis Armando Armendáriz Ruiz, me dijo que tenía algo para mí. Subimos a su oficina. El teatro (anoche lo dijeron) fue cine en un tiempo. Tal vez donde hoy está la oficina fue parte de la cabina de proyección; es decir, la vocación de ese espacio es proyectar sueños y Bonifaz sigue el script al pie de la letra.
Ya se sabe que, a veces, la vida no está en la butaquería sino en la "parte de arriba"(también hubo un tiempo en que la cabina de proyección fue lugar de encuentro para los compas bolencones. Por esto el grito de "¡Cácaro, deja la botella!" era frecuente).
A propósito del "Verde que te quiero verde" de Lorca, Bonifaz me entregó una relación de "verdes" con nombre propio.
Bonifaz encontró ayer, como si cosechara en el valle de Tzimol, un manojo de verdes. En carta dirigida a mí, escribió:
"Aquí una serie de verdes que, cuando fui capturándolos, me impresionó su variedad; aquí están:
Verde bandera,
Verde aceituna,
Verde musgo,
Verde esmeralda,
Verde Nilo,
Verde agua,
Verde limón,
Verde amarillento,
Verde pasto,
Verde oscuro,
Verde claro,
Verde militar,
Verde pistache,
Verde olivo,
Verde zacate,
Verde malva,
Verde subido,
Verde bajo,
Verde perico,
Verde curguatón,
Verde azul,
Verde botella,
Verde hoja,
Verde "fosforecente",
Verde brillante, y
Verde opaco".


Queda claro que dentro de esta gama, el verde curguatón es un obsequio de Comitán para el mundo; así como el verde bajo puede ser un albur que, generoso, entrega el barrio de Tepito.
Una "blogger", que firma como Negra Murguera, dice que hay verde viejo y que este tono es más agradable que los viejos verdes
Óscar Bonifaz termina diciendo que "también nuestras esperanzas las pintamos de verde".
Sí, mi querido maestro, la gracia de la vida, como siempre, es hallar el tono adecuado. Hay compas que la pintan de "verde botella"; hay mujeres confusas que la pintan de "verde azul"; y hay otras que terminaron casándose con hombres llamados Pacos porque, de jóvenes, se plantearon el futuro como un dilema simple: "Verde o Paco", y nada Lorquianas despreciaron el color que, desde siempre, "predispone a la tranquilidad".

P.d. El 12 juega México contra Estados Unidos. Medio mundo le irá a "la verde". ¿Esta tonalidad es lo que se dice "un verde de la patada"?