miércoles, 6 de mayo de 2009

LOS PRESCINDIBLES


Un día el país entró en contingencia sanitaria. Las autoridades determinaron suspensión de actividades no esenciales.
Los encargados de la salud y de los servicios básicos como energía eléctrica, agua y demás ajopuerros continuaron laborando.
Se suspendió, por ejemplo, la actividad educativa; es decir, esta actividad -ante una emergencia- es prescindible.
El hombre, tranquilamente, puede dejar de estudiar un año,por ejemplo. Lo que no puede hacer es dejar de sembrar lo que comerá.
Sin embargo, esta reflexión insulsa no corresponde a la realidad. El dinero que el gobierno federal invierte en educación supera en mucho al invertido en el sector agrícola.
El sector educativo exige más presupuesto ya que siempre es insuficiente para dar una educación de calidad. Los resultados educativos son magros. Mientras tanto, el gobierno destina más y más dineros.
La educación es prescindible y sin embargo ahora con la contingencia quedó demostrado que si México no invierte en la investigación científica el país seguirá en un rezago insalvable, cuyo único puente es la educación.
¿Qué es lo realmente esencial?
Yo no sé. Tal vez el lector.